miércoles, 13 de febrero de 2013

Nueva zona de campeo

   Ayer como era martes de carnaval y aún me quedan días de vacaciones del 2012 pendientes de disfrutar, me pedí un día de permiso y lo aproveche para acercarme a prospectar una zona que aún no conocía a pesar de estar a poco mas de 20 Km al Oeste de Zamora capital.

   Se trata de la localidad de Almaraz a orillas del Duero. Zona en la que podriamos decir comienzan Las Arribes del Duero. Es por tanto una zona de paredes rocosas, don de el río comienza a encajonarse formando interesantes cortados fluviales.

   La zona, además de ser muy interesante para la observación de aves, lo es también por la posibilidad de hacer varias pequeñas rutas de senderismo que nos pueden llevar hasta un antiguo molino, hasta las minas de estaño ya abandonadas, conocer los restos de una vieja Ermita o bien hasta la Cascada de las Pilas que era mi objetivo en esta ocasión.

   Como no disponia de mucho tiempo, llegue con el coche hasta el punto en el que se divisa e río y luego inicie el camino de descenso a pie.

   El tema pajaril, estaba mas bien parado pero no tardo en aparecer lo que sería la gran sorpresa y alegria de la jornada. Cuando seguía con los prismáticos el vuelo rio abajo de un cormorán grande (Phalacrocorax carbo) asustado por mi presencia, descubro nadando rio arriba y en paralelo a la orilla un ejemplar de nutria (Lutra lutra) que a los pocos segundos se sumergio para desaparecer entre las cañas secas. Aguarde un rato por si volvia a aparecer pero de momento no salía, por lo que continue mi marcha hacia la cascada.

   Un poco más adelante un precioso martín Pescador (Alcedo Athis) llamó mi atención con su "silbido", al echarme la cámara a la cara, el reflejo del sol en el objetivo, debio delatar mi pesencia por lo que voló como una flecha fuera de mi alcance. Una Lavandera blanca (Motacilla alba) cruza el río con su vuelo ondulante. Un macho Colirrojo tizón (Phoenicurus  ochruros) balancea su cola volando de roca en roca.
   Seguí caminando con un ojo en el rio y el otro en el cielo por si parecian las reinas, pero de momento lo único que se veía era algún que otro Milano real (Milvus milvus) un solitario Busardo ratonero (Buteo buteo) un Mirlo común (Turdus merula) en lo mas alto del cortado que por un momento me hizo dudar si podria tratarse de un Roquero solitario.



   Me iba acercando a la zona de ruinas próxima a la cascada cuando un simpático Petirrojo (Erithacus rubecula)se puso a tiro.



   Cuando me estoy aproximando a la cascada, descubro en la arena el rastro húmedo que seguramente ha sido dejado por la nutria no hara mucho rato. Me aproximo con sigilo por si hay un segundo ejemplar no asutarlo pero no lo hay, en cambio, me encuento con una pequeña cascada que vierte sus aguas en una cristlina poza circular excavada en la roca.



   Continuo el paseo aguas arriba y pronto encuentro un pasamanos de cuerda y tres escalones de tetracero en la roca, subo y descubro una segunda cascada con su correspondiente poza justo encima de la anterior, al lado de esta hay un tunel que no consigo recorrer en su totalidad por falta de luz y porque por el corre agua.

   Retrocedo un poco y al continuar mi camino descubro a lo lejos (muy lejos) el majestuoso vuelo del águila perdicera (Hieraaetus fascitus). Foto testimonial muy recortada, con el Bigma a tope y a pulso y tras unos minutos se pierde tras un cortado.



   Comienzo a desandar el camino y al poco dos Buitres leonados (Gyps fulvus) Salidos de no sé donde pasan planeando rumbo Oeste.

   Al llegar de nuevo al pie de la primera cascada, un Carbonero común (Parus major) canta en una rama llena de brotes y un herrerillo común (Parus ceruleus) anda revolotenado y haciendo equilibrios por todos los arbustos de la zona.



   Junto a la pared rocosa que tengo a mi derecha un grupo de 8 Aviones roqueros (Ptyonoprogne rupestris) busca su sustento en forma de insectos voladores.



  Y es que la primavera en esta zona parece adelantarse, florecillas, moscas y un par de pequeñas mariposas blancas así lo anuncian.



   De repente al mirar al río alertado por el grito de una Garza real (Ardea cinerea) que se aleja, descubro de nuevo a la nutria y esta vez , me da tiempo a hacerle unas fotos aunque la distancia supera los trescientos metros y a comtemplar sus evoluciones en el agua antes de que de nuevo desaparezca entre la seca vegetación palustre de la orilla, levantando a una Lavandera cascadeña (Motacilla cinera).



   Comienzo la ascensión hacia el coche, en lo alto de unas ramas descubro un alcaudón real que levanta el vuelo para pasar hacia la otra parte del pequeño valle, un poco mas adelante, veo un nido de ¿avispa? hecho de barro, un Verderón (Carduelis chloris) levanta el vuelo meto los "trastos" en el maletero y emprendo el camino de vuelta a Zamora.



   Una vez dejado atras el pueblo de Almaraz, una silueta recortada contra el cielo provoca el lógico frenazo y tirando de teleobjetivo descubro que no se trata de una, sino de dos majestuosas águilas reales (Aquila crhysaetos).

   Contento con los resultados de la jornada, termino haciendo esta fotillo que os dejo como despedida.



   Ya llegando a Zamora, Tórtolas turcas, Gorriones comúnes, Ánade azulón, Estorninos negros, Grajillas y Cigüeñas blancas completan la lista.

1 comentario:

  1. Estarás contento...vaya observaciones, y eso que disponías de poco tiempo!

    No te quejes de esa Perdicera. Espera a ver mi foto y ya te darás cuenta de la suerte que tuviste...

    Une entrada de 10.

    UN Saludo.

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